Algo triste y por lo visto un poco agobiante, sin título
Tenemos una foto muy vista en el salón y otra en el comedor. Y una en la habitación. Taxis de Nueva York, donde nunca estuvimos; especias de la India, que nunca probamos: fotos muy vistas, con colores saturados. Elevamos sueños desvaídos colgándolos a estas paredes cotidianas, al lado de ventanas que enmarcan edificios oxidados, demasiado próximos, y cielos cargados. Nuestros sillones ya tienen forma, la nuestra, trabajada en veinte años de jubilación. La tele está encendida, el experto habla de algún fenómeno que ya no entiendo, el gas presenta volumen igual al del recipiente o de la habitación donde se contiene.
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